martes, 7 de julio de 2015

Ensayo "El papel de la responsabilidad social en las organizaciones desde el enfoque socioformativo"




EL PAPEL DE LA RESPONSABILIDAD SOCIAL EN LAS ORGANIZACIONES DESDE EL ENFOQUE SOCIOFORMATIVO
La aparición de la empresa moderna obedece a una función social clara, relacionada con la necesidad de optimizar el funcionamiento de los mercados. Todo ello, conlleva  a las organizaciones a que direccionen todos los recursos que sean necesarios para lograr las metas de  producción o en su caso de servicios.
Por todo lo anterior, en la actualidad se genera en el sistema social un único poder soberano, el poder económico, al que se subordinan todos los demás poderes. En este contexto, la ética no ha sido nunca un concepto ajeno al mercado y a la economía. Debido a esto el trabajador desconoce el sentido total de su trabajo ya que dicho sentido no importa en lo absoluto para la lógica ni para el funcionamiento de la organización. Es decir, bajo estos valores materialistas, los trabajadores conciben a su empresa como mera fuente de salarios y beneficios económicos.
Así pues, en última instancia la responsabilidad ética y moral del comportamiento de las organizaciones es en primer lugar de la sociedad que no ha sabido desde sus múltiples instancias socializadoras, familia, sistema educativo y sistema laboral instalar a los individuos en la lógica del derecho a la vida, del respeto al otro, de la cooperación y de la solidaridad.
Sin embargo, ha sucedido todo lo contrario, los valores en los que se sustenta nuestra sociedad se relacionan con la competitividad, el dinero, el prestigio, el poder y el reconocimiento fácil; es decir, con valores instrumentales que solamente no son válidos si no solo nos sirven para lograr nuestros fines a costa de los demás.
Por todo lo anterior, las empresas cada vez más van adquiriendo hábitos partiendo de su libertad para actuar y para tomar sus decisiones. Esta forma de hacer las cosas de las empresas, es precisamente lo que intenta orientar la ética empresarial, contribuyendo a que se vaya configurando una cultura empresarial que responsa a las exigencias de los diferentes grupos de interés que rodean a la empresa (García, 1996).
A su vez, en el contexto de economía y sociedad global que se caracteriza por una interdependencia cada vez mayor, donde el terreno de las consecuencias de nuestras acciones se amplía sensiblemente. Aumenta por lo tanto la responsabilidad de la empresa a la hora de tomar decisiones cuyas consecuencias afecten a los diferentes grupos de interés de la empresa como son: clientes, trabajadores, proveedores, sociedad y propietarios o accionistas (Cortina, 2003).
Al mismo tiempo, las empresas son instituciones sociales que como tal necesitan de una legitimidad socialmente para seguir manteniendo su papel en la sociedad y por lo tanto permanecer en el tiempo. Esta legitimidad la alcanza la empresa dando respuesta a lo que la sociedad espera de ella y asumiendo los valores y pautas de comportamiento que la propia sociedad marca. De esta forma la empresa genera confianza valor clave para que la empresa sea un proyecto de largo plazo (García, 1996).
De este modo, se entiende que la responsabilidad social  genera un compromiso ineludible por parte de cada persona, las organizaciones y el Estado donde se busca un equilibrio ecológico, solidaridad, justicia social y la mejora de la calidad de vida con el fin de hacer frente al reto de buscar la integración social (Tobón, 2008).
Todo ello implica entonces emprender acciones precisas para fomentar la responsabilidad social en las instituciones y empresas, tanto en el marco de su cultura organizacional en la gestión del talento humano. Hay que mencionar, además que todo este proceso requiere de la formación de personas idóneas con compromiso ético, teniendo como base el pensamiento complejo, abordando la formación humana (Tobón, 2008).
Por otra parte, el pensamiento complejo es un método para la construcción del conocimiento de cualquier fenómeno teniendo como base la forma y la dinámica de cómo está tejido dicho fenómeno en sí y con respecto a otros fenómenos, con el fin de comprenderlo y explicarlo en sus procesos de orden-desorden-reorganización, mediante el análisis disciplinario, multidisciplinario, interdisciplinario y transdisciplinario (Tobón, 2008).
Así mismo, abordar la responsabilidad social desde el pensamiento complejo es buscar que las acciones humanas promuevan el bienestar social y el equilibrio ecológico o al menos no afecten esto, para lo cual es preciso tener presente que toda acción tiene una reacción y que un pequeño acto puede generar grandes consecuencias en cadena que pueden ser positivas o altamente destructivas (Tobón, 2008).
Con la finalidad de que la sociedad a través, de sus diferentes instituciones debemos de tener acciones puntuales para que las personas desarrollen y vivan con responsabilidad social, en un perspectiva compleja, es decir, con un fuerte compromiso ético. Por todo ello, en el mundo tan complejo en el que vivimos no es suficiente con la educación familiar ni con las instituciones educativas, por lo tanto es necesario que toda la sociedad participe en formar para la responsabilidad social y busque que en efecto se viva con dicha responsabilidad (Tobón, 2008).
Es entonces que considero que es de suma importancia de formar a personas competentes en las empresas e instituciones para que en conjunto afrontemos los retos de la actualidad, ya que el entorno en el que vivimos actualmente es sumamente cambiante. Dichas personas tendrán como objetivo principal enfocar actividades que fortalezcan la cooperación, la solidaridad, el equilibrio ecológico y la convivencia sana. Y sobre todo que tengan un comportamiento ético con su entorno, eso es tener responsabilidad social.
Además, considero como profesionista y docente tengo una responsabilidad de contribuir en la formación de capital humano para que en conjunto tengamos el firme compromiso de contribuir en mejorar el tejido social en que vivimos.




BIBLIOGRAFIA

Cortina, A. (DIR.) (2003), Ética de la empresa. Claves para una nueva cultura empresarial, Madrid, Trotta. Sexta Edición
García-Marzá, D. (1996), La ética como instrumento de gestión empresarial, Castellón, Publicaciones de la Universitat Jaume I de Castellón.
Tobón, Sergio. (2008). La responsabilidad de las instituciones sociales en la formación de profesionales con compromiso ético: Un reto en Colombia. Universidad Complutense de Madrid. www.cife.ws
Zarco Martín, Victoria, Rodríguez Fernández, Andrés. Ética y responsabilidad social en las organizaciones actuales Revista Internacional de Ciencias Sociales y Humanidades, SOCIOTAM [en línea] 2005, XV (julio-diciembre): [Fecha de consulta: 6 de julio de 2015] Disponible en:<http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=65415211> ISSN 1405-3543








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